Inauguro la Fase 1 de desescalada en Madrid, no muchos restaurantes han podido abrir estos días, los que tienen grandes terrazas son los protagonistas con llenos absolutos en capital de España.

Aunque todos deseemos que la normalidad regrese a nuestras vidas no va a ser así por ahora, la seriedad de la situación exige tomar las medidas necesarias en los restaurantes y parece que nuestros profesionales lo tienen muy claro. Mi primer día de esta Fase 1 tuvo lugar en la muy conocida terraza de Rubaiyat, el restaurante que en 2006 sustituyo al emblemático Cabo Mayor, gloria de la gastronomía madrileña regentado por el desaparecido hostelero y mecenas cántabro Víctor Merino.

El grupo tiene tres restaurantes en São Paulo, en la Alameda Santos (desde 1974) y en la Faria Lima (desde 1976), además de la Figueira Rubaiyat (2001). La marca Rubaiyat es reconocida como especialista en nobles cortes de carnes, mientras que La Figueira se destaca con la cocina mediterránea. También tienen presencia en Rio de Janeiro, dentro del Jockey Club y en Brasilia, cerca del lago Paranoá. El grupo también está presente con restaurantes en Chile, México, madrid y argentina.

Recibimiento tan encantador como siempre de su equipo, con pantalla de protección de la <hostess> y todas las sabidas medidas de protección de bienvenida. Todo el equipo protegido con marcarillas, tema este que va a tener muchas innovaciones para no perder la sonrisa y amabilidad en el gesto del equipo. Cubiertos en el plato esterilizados y sellados en bolsa independiente de plástico, aspecto este que creo que en restaurantes de este nivel no son necesarios, aunque de mucha seguridad al comensal, si vamos a un local de nuestra confianza es señal de que confiamos que los cubiertos se van a  poner en la mesa con las medidas de higiene y seguridad consabidas.

A la carta se puede acceder con código Bidi que está en un cartelito sobre la mesa, este aspecto personalmente me encanta ¿podremos fin al papel innecesario ya en nuestro tiempo?, la carta de vinos sigue siendo en papel y se entrega esterilizada y dentro de otra bolsa sellada. En este punto ya me preocupa el exceso de plástico utilizado que irá irremediablemente a engrosar la masa de desechos a reciclar, se podría hacer también con código Bidi, yo lo aplaudiría.

En lo gastronómico empezamos con el servicio de pan y aperitivos con sus famosos panes de queso y frito.

Después de una mañana de trabajo el cuerpo nos pide una agradable blanco y mi compañero de mesa, el Chef Ekaitz Apraiz (Rte. Tunateca Balfegó – Barcelona) me permite hacer la elección así que me decanto por un Gotes Blanques 2017, quiero en la copa esa frescura nacida entre Cornudella y la Morera y elaborado con mis predilectas Garnacha blanca y Garnacha gris.

Comenzamos con un suave Ceviche cítrico de Róbalo con granizado de caipiriña de mandarina seguido de un Canelón frío de bogavante con ensalada verde y vinagreta de chalotas. Dos platos que afloran la cocina internacional por la que Rubaiyat apostó dejando entrar otras influencias además de su cocina brasileña.

Cambio de registro para dar entrada a uno de los productos básicos de su cocina, la carne, utilizada para elaborar este Steak Tartar cortado a punta de cuchillo que me gustaría con más tono picante.

Aunque veníamos con intención de comer pescado al horno, solo hay este día merluza y nos decantamos por su Pulpo a la brasa con patata con azafrán, tomate asado, cebolla asada y tapenade de aceitunas de importante grosor que hace difícil su ternura.

Y terminamos con una Tirita de Picanha que es uno de los cortes que dominan bien, corte que se encuentra en la parte posterior de la espalda de las vacas que esta cadena de restaurantes cría para seleccionar posteriormente.

En lineas generales, y dado el normal nerviosismo de algún camarero que ante tanto cambio de cubiertos embolsado perdía el control de los que eran necesarios en la mesa, todo digno de alabar, en dos días lo tendrán todo controlado y así se lo deseo. Este restaurante tiene muchos recuerdos para mí desde su origen y no hay verano que no visite esta terraza, es sin duda una de las mejores de la ciudad.

Restaurante Rubaiyat

Calle de Juan Ramón Jiménez, 37 – 28036 Madrid
Telf. : (+34) 91 359 10 00

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