En este post os quiero invitar a viajar conmigo a Chile para conocer el impresionante Desierto de Atacama, el más árido del mundo, y algunos de sus secretos gastronómicos como el “Quincho”. Comienza en Atacama un viaje que me llevará a recorrer desde España más de 32.000 kms. y donde conoceré los lugares más sorprendentes de este gran país que es Chile. A lomos de un flamante avión de LAN Chile viajaré hasta Santiago de Chile para luego dar el salto hasta Antofagasta.
Bienvenidos a un desierto de contrastes.
De las más áridas tierras del desierto a espacios donde el agua se abre camino por cañones y senderos Atacama no deja a nadie indiferente, su extrema belleza invita a disfrutar de los muchos espacios naturales que forman parte de su superficie.
La Ruta de los cactus nos sorprende a cada paso con una naturaleza exuberante, y un permanente caudal de agua que en algunos momentos se convierte en cataratas.
Hasta uno de sus puntos más altos de este cañón tendré subir para encontrar los restos de las antiguas piedras utilizadas para desuerar el queso que los pastores de las tribus indígenas Machucas hacían aquí hasta no hace muchos años. Los restos nos muestran las cuevas donde los pastores guardaban los animales al llegar la noche.
Buenos compañeros de ruta como Alfonso, Tomás y David me acompañaron en una ruta de bicicleta de montaña de 34 Km. para alcanzar la Laguna Cejar…
…donde descubrimos lo que la sal puede hacer en combinación con el agua. Aquí al igual que en el Mar Muerto es posible flotar en un agua con altísima densidad de sal.
Y para culminar con otra maravilla de la naturaleza viajamos hasta el Campo Geotérmico El Tatio donde es posible ver geysers de vapor, agua y barro.
La condición imprescindible para disfrutar de su belleza en estado puro es madrugar, entre las 06.00 y 07:00 h. y a temperaturas bajo cero, así descubriremos como la impresionantes fumarolas emergen a la superficie a través de fisuras de la corteza terrestre alcanzando una temperatura de 85º C y unos 10 metros de altura.
Estos geysers se originan al entrar en contacto un río helado subterráneo con rocas calientes, todo un espectáculo que se encuentra en la región de Antofagasta.
Una buena forma de combatir el frío y las tempranas horas es un Mate de Coca muy consumido aquí por la gente de la tierra y los muchos argentinos que aquí residen y trabajan.
La fauna se manifiesta a cada paso y no es difícil ver zorros del desierto deambulando y cazando pequeños roedores como la vizcacha.
El contraste continuo de este desierto nos lleva de las zonas más áridas a espectaculares humedales.
Humedales que pueblan infinidad de aves acuáticas, algunas tan espectaculares como los flamencos que mostraban ya su fuertes colores rosas adquiridos por la ingesta continua de camarones.
Rebaños de Vicuñas y Guanacos tapizan montañas y praderas dando vida a un paisaje multicolor lleno de vida.
Los ríos llegados de lo más alto de las cumbres permiten disfrutar de oasis de autentico lujo donde se han preservado las lagunas autenticas.
Mi centro de operaciones en este viaje tan especial ha sido el Hotel de Larache una de las joyas de Explora , un lugar mágico que ha preservado este espacio y que ha revitalizado con la plantación de árboles autóctonos, dotado con la más modernas infraestructuras, caballerizas con caballos criados por Explora, las mejores bicicletas de montaña del mercado, piscinas y un sin fin de servicios, esconde una gastronomía de lujo en su interior.
A los mando de esta cocina está el Chef Matías Pizarro, buen apellido para un conquistador de tierras lejanas y mejor aún para un conquistador de paladares. Durante los días que duró mi aventura en este bellísimo desierto Matías cuidó de nuestros estómagos y nos deleitó con platos de influencia internacional pero sin perder su denominación chilena.
Entre ellos su principal aperitivo, el Merkén o Mequén, un rico aliño que se prepara con ají seco ahumado, cebolla, pimiento, tomate y hierbas, es tradicional de la cocina mapuche de Chile.
También pudimos probar su Causa de Calamares en su Tinta, la causa a la limeña o causa limeña es un plato del Perú pero muy extendido en Chile de origen precolombino, ya entonces se preparaba con la papa amarilla y ají triturado. Matías elabora con este plato una versión muy personal y deliciosa.
Y otro plato de influencia peruana, una Trucha con Pepián de Choclo, el pepián tambien es llamado pipián, pipian o pepian, se elabora con maíz tierno, llamado en Perú choclo. Es un plato que tiene su primera referencia escrita en boca del sacerdote jesuita español Diego Gonzales Holguín (1560-1620), define el sacerdote su origen en las palabras quechuas pipuyan, pipuyachini, pipu api hina que significa guiso espeso y cuajado, características del pepián.
La Quinoa, de moda en todas las cocinas del mundo, formó parte de una rica Perca con Quinoa. La quinoa es un cereal que nace en los Andes, es técnicamente la semilla de una hierba, aunque es considerado un grano. Pertenece a la familia de las quenopodiáceas (como las espinacas), es rica en proteínas, hierro y magnesio y su sabor es agradable y textura suave.
En el capítulo de postres disfrutaré de un Panqueque de Chocolate y Frutos Secos.
Y otro sugerente Panqueque de Dulce de Leche. Fueron muchos los platos de influencia internacional pero he seleccionado estos por estar más identificados con cocinas de este lado del Atlántico, concretamente por las cocinas de sus hermanas argentina y peruana.
No podía faltar en Atacama a un Quincho chileno, es un edificio especialmente equipado para la preparación de asados. El nombre viene de las características de la construcción, ya que estos espacios están frecuentemente cubiertos con un techo de paja.
Los expertos maestros del quincho saben a la perfección el grado de fuego necesario en cada caso, también distribuyen las carne entre sus invitados al gusto de los mismos, es un acto social donde el maestro de la carne charla contigo, no es solo gastronomía.
Berenjenas, pimientos, maíz, pepino, ensaladas, arroz, quinoa, puré de cereales, pollo y otras carnes completan esta fiesta culinaria.
Hablar de vinos de Chile es hablar de un mundo de sabores diferentes, empezando con loe elaborados con su uva Carménère, originaria de la región de Médoc (Burdeos). Cataré varios vinos en mi viaje y comenzamos con Koyle Gran Reserva 2012, nacido en el Alto Acolchagua. Del suelo de esta región se obtiene una mineralidad bien definida. La peculiaridad de esta uva hace de los vinos elaborados con ella algo muy especial.
En tierras chilenas el Chardonnay se da al terruño con igual acierto, un buen ejemplo es el Espino Gran Cuvée 2012 de William Fèvre Chile, elaborado en las montañas a 1.000 metros sobre el nivel del mar en San Juan de Pirque. El resultado un vino elegante de marcada mineralidad y con una acidez vibrante.
La cerveza también tiene buena representación en Chile con producciones locales de mucha calidad y elaboradas al gusto del consumidor español, me gustó especialmente Kunstmann Gran Torobayo, tipo Strong ale, artesanal y elaborada en Valdivia con un 7,5% de alcohol, se debe servir a 8ª.
Mi estancia en Atacama toca a su fin, ahora regreso al aeropuerto para dar el salto a la parte más fría del país, será otro reportaje cargado de vivencias.
Quedan en el tintero y en la tarjeta de mi cámara cientos de fotos y de cosas por contar, ha sido una experiencia vital emocionante donde he tenido el placer de conocer la cultura chilena de forma muy directa. Lo mejor sus gentes tranquilas, educadas y muy respetuosas que siempre sonríen y te muestran todo lo que saben y son. Quiero agradecer a mi amigo Alfonso de Be Marketing, a Lan Chile y a Explora que me permitieran hacer posible este sueño ¡gracias de corazón, regresaré!
Si quieres hacer este viaje en grupo: www.imagenlimite.com
Si quieres hacer este viaje de forma personal: www.viajacomoquieras.com