Lo primero en llegar son unos Hongos Shitake rebozados con una sugerente salsa, ya me estoy arrepintiendo de no traer mi cámara, no voy a poder hacer justicia a estos platos. El aperitivo ya me gusta, estas suculentas setas fragantes (Letinula Edodes) llamadas así por los chinos el chef sabe cuidarlas para que no pierdan sus cualidades.
Una carta curiosa con platos que llaman mi atención me dice que el primer plato va a ser un «Pudding de Pulpo de Anzuelo» y no me equivoco, merece la pena esta curiosa propuesta con textura de pudding de pescado donde el componente lácteo es evidente y el sabor del pulpo es la estrella.
No me he olvidado del vino, de su curiosa carta donde puedes encontrar blancos desde 18 euros y tintos a partir de 21 euros y tomar vinos por copas, he seleccionado un Brunus D.O. Montsant, me apetece hoy esa intensidad de los vinos de Tarragona, de esta denominación casi el 70% de su producción va a parar a Estados Unidos y Alemania, sin duda una delicia de vinos. En este caso es producido por la Bodega Portal del Montsant que como curiosidad os diré que crea incluso vinos «Kosher» siguiendo las normas «Kashruth». Brunus está elaborado con uva Cariñena, Garnacha tinta y Syrah lo que le aporta aromas a flores y en boca destacan sus frutas rojas acompañado de notas minerales, especias y ahumados.
Y precisamente ese juego se repite en uno de los platos principales, un «Rissoto versión Cesar Salad»no me puedo marchar sin probarlo. Es un plato contundente y así me lo advierten en sala, curiosa adaptación de la ensalada Cesar Salad convertida en un Rissoto.
De mis compañeros de mesa pruebo el «Tataki de Atún Rojo con Arroz Salvaje» presentado como una pieza con los cortes realizados y sobre una cama de arroz salvaje con intenso sabor. Bien cocinado y acertada combinación con toque exótico.
No se queda atrás un rico «Helado combinación de dos tipos de chocolates»que ya cierra nuestra cena de una forma genial y muy dulce.
Quiero conocer al artífice de mi cena y pregunto por el chef. Encantadores y atentos en sala no tardan ni un minuto en llamar al maestro de esta noche, Antonio Caramé, Jefe de Cocina y gaditano 100% lleva la pasión de la cocina en la venas, formado en la arrocería «La Marea» en Cádiz, y con stages en diversos restaurantes con estrella Michelín de toda España, es un cocinero entregado a su trabajo en este nuevo proyecto moderno y dinámico que creo tiene mucho que ofrecer. Me cuenta quienes son sus propietarios y nombra a una ya conocida hace años del sector, Begoña Fraire con la que ya tuve el placer de trabajar hace años en Loft 39, gran profesional y con las ideas muy claras, seguro que triunfará con este nuevo proyecto.
Me despido de todo el equipo que nos ha producido una magnifica impresión y espero regresar muy pronto a disfrutar de su cocina, me queda esa agradable y cosmopolita impronta de los más modernos barrios de New York y Londres, sus propietarios apuntan concretamente al londinense Shoreditch y tienen razón respira ese ambiente ¡Os deseo la mejor de las suertes!